Es un proyecto de recuperación de obras y datos biográficos de escritoras de Latinoamérica y El Caribe, con el propósito de conformar un vasto corpus que permita registrar, analizar, estudiar y repensar, con el apoyo de las nuevas tecnologías, el panorama de la “escritura de mujeres” en este lado del mundo, desde el siglo XV hasta 1950, aproximadamente.
Para ser incorporadas, las autoras deben cumplir tres criterios:
* Haber nacido en o antes de 1940 en Latinoamérica y El Caribe; o, en el caso de las extranjeras, haber aportado a la vida literaria de estas regiones.
* Haber fallecido ya.
Si quieres una presentación rápida del proyecto, puedes leer o descargar este folleto; para una presentación por extenso, sigue leyendo.
¿Por qué “Hybris”?
Esta palabra griega significa desmesura, exceso, soberbia, arrogancia, insolencia… Sirve para nombrar el deseo de alguien de transgredir el orden establecido por los dioses, la naturaleza o la sociedad.
La Antigüedad nos legó ejemplos de seres que retaron al destino, a los dioses o a la autoridad, como Prometeo, Tántalo, Edipo, Ticio, Antígona, Ixión, y otros más. Y nos legó también la correspondiente enseñanza moral: la hybris siempre recibe castigo. La encargada de impartir el castigo divino es Némesis, diosa de la fortuna, la justicia… y la venganza. Hay numerosas representaciones suyas; y, curiosamente, no ha llegado a nuestros días una sola representación de Hybris.
Ahora, ¿valdría afirmar que la hybris ha sido la misma para toda humanidad? Si miramos nuestra historia, veremos que no. Para no ir más lejos, basta recordar que los roles y los estereotipos de género han jugado un rol importante en ello, pues los varones y las mujeres se han rebelado contra distintos órdenes a lo largo de los siglos… y, como es bien sabido, han sido principalmente los varones quienes han determinado las reglas de dichos órdenes.
Las mujeres y la hybris
La genealogía de Hybris
En la mayoría de las fuentes que hablan sobre Hybris, ésta es descrita como una ninfa o una diosa, pero se le ha perdido casi por completo el rastro.
En algunas versiones, ella y Júpiter (Zeus) engendraron a Pan (“Todo”), mitad hombre y mitad cabra; o sea, un híbrido.
En algunas versiones, también, Pan y Eco engendraron a Iinge o Iynx.